Una vez más abro mis ojos en este cuarto, subo la persiana y un rayo de sol choca contra mi piel a medio despertar...
Pero esta vez hay algo diferente: unos rojos geranios :)
Sí, necesitaba darle vida a esta habitación. Esas flores llamaron mi atención y no me lo pensé dos veces. Ahora me alegran la vista y me ocupan parte del tiempo antes desperdiciado. Mojarlas, quitarles las viejas hojas, limpiarlas, ...
Pues eso, ahora me ha dado por las plantas...
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